La trama narra como el jefe de batallón Roy Miller en una de sus incursiones en las ciudades de Iraq en busca de armas de destrucción masiva (ADM) se entera gracias un lugareño (Freddie) que altos mandos de Iraq se están dando cita en una casa cercana. Miller junto con su escuadrón se lanza a la cacería de dichas personalidades consiguiendo reconocer entre los asistentes al General Al Rawi pero sin conseguir más que atrapar a uno de sus empleados. Al dar a conocer esta información a altos mandos se da parte a las fuerzas especiales para la retención e interrogación del detenido quedándose Miller con una libreta de direcciones y nombres. En sus indagaciones hace equipo con un agente de la CIA quien le hace notar que la búsqueda de ADM es una tarea fútil y que existen otras razones por las que el ejercito norte americano se encuentra en guerra con Iraq mas Miller debe averiguarlas solo. Poco a poco Miller va descubriendo secretos que lo llevan a la verdadera razón de la invasión de Iraq.

Las actuaciones para un film de guerra están bien. Matt Damon como Roy Miller, un soldado dedicado, obediente y con cierta inteligencia que le permite ver más allá de las órdenes realiza una buena labor. Brendan Gleeson como el agente de la CIA Martin Brown no puede lucirse debido al poco tiempo que tiene su personaje para interactuar con el personaje de Damon. Greg Kinnear como el caballo negro de la trama, el diplomático Clark Poundstone. Me convenció su actuación debido a que la pomposidad, prepotencia y argumentos cargados de seguridad y control, como se intuye un personaje de ese cargo actuaria los desempeña de una manera convincente.

En conclusión, Green Zone viene a ser un thriller para el pueblo gringo pues para el resto del mundo es lo ya sabido en la realidad aun cuando el film justifica la invasión como un plan orquestado por una sola persona y no por fines económico-militares (petróleo y presencia en la zona). Por lo tanto en la escala láctea recibe una evaluación de 8. En castellano esto se traduce como: “Poca acción, algo de suspenso y drama. Una película para pasar el rato degustando una cheve.”

La trama es la típica de los héroes de acción de la vieja orden. Un maton (Icarus) que vive bajo la fachada de un hombre de negocios ve comprometida a su familia al ser vendida su identidad a la mafia rusa. Al matar a su mujer e intentar eliminar a su hija llevan a Icarus a investigar quien vendió su identidad, porque lo buscan y dejar en claro que quien se mete con el no tiene oportunidad.

Las actuaciones son las típicas de este tipo de películas. Dolph Lundgren como Icarus es lo mejorcito en actuación de la película El ya está acostumbrado a este tipo de historias, sabe que proyectar y en la faceta del personaje de hombre de familia se permite dar algunos guiños de emoción a su personaje lo que lo vuelve polifacético. El resto del elenco es desconocido.

Los efectos especiales más o menos bien logrados. Es visible que la calidad de las explosiones y de las destrucciones de las locaciones y vehículos no son de la misma calidad que de cine al ser una película directa a video. La banda sonora es nefasta, imperceptible. La dirección corre a cargo del mismo Dolph Lundgren.

En conclusión, Icarus es una cinta de acción de la vieja orden es decir, hay un semidesnudo femenino con la escena de apertura, un solo hombre erradica a las fuerzas elite de un cartel del crimen organizado (muy macho), algunas coreografías de artes marciales (en realidad son combate cuerpo a cuerpo con el empleo de llaves y proyecciones). No es mala película sin consideramos que es un churrofilme para esos fines de semana que la televisión nos abandona. Por lo que en la escala láctea esta cinta recibe una evaluación de 7. En castellano esto se traduce como: “Falto mas carne que este viejito se comiera. Por los balazos y madrazos todo esta aceptable.”