La trama sigue mas o menos el guion empleado en el juego original de Max Payne. Es decir, Max es un policía que busca venganza por el asesinato de su esposa e hijo. Y para ello lidia con distintos niveles de la mafia que lo llevan a la empresa para la que trabajaba su esposa, Aeris. Finalmente descubre que el asesinato de su esposa no fue un evento fortuito sino que fue planeado por la cabeza de Aeris debido a que la esposa de Max descubrió un proyecto secreto llamado Valkir. Como es de notar la trama es de gran semejanza a Punisher y a cualquier otra donde se maneja el concepto de vengador aunque con algunos detalles que podrían darle una personalidad propia.
En la cuestión de actuaciones no hay mucho que analizar. Mark Wahlberg como el teniente Max Payne hace lo suyo. Es decir, intenta proyectar la personalidad de una persona que le importa poco o nada su vida, es decir un vale madres. Y como tal no mide sus acciones, es temerario y hasta cruel pero, pero Wahlberg se queda corto. Se limita o es limitado por el director, imposible saberlo conociendo el historial de malos papeles escogidos por el actor, a posar toda la cinta con una rostro inexpresivo, impávido que mas bien asemeja aburrimiento o cansancio. Mila Kunis como Mona Sax en teoría se antoja como un personaje de atractivo visual mas su función se concreta a relleno. Su inclusión es meramente por seguir la trama del juego aunque su ausencia no hubiera significado un cambio en la historia. Ludacris como el detective Jim Bravura es un claro ejemplo del dicho zapatero a tus zapatos. Nuevamente, de la forma en que fue interpretado si fuera borrado de la historia nadie lo extrañaría. Chris O’Donnell, Olga Kurylenko y Nelly Furtado son rellenos o mejor dicho “la forma de engrosar el elenco con personajes semi famosos”.
Los efectos especiales son algo fuera del universo del juego y que le dan al filme otra sensación. Toda la cuestión de los demonios o ángeles en un aparente infierno le dan un gran atractivo visual. Lo malo es que los efectos son muy semejantes a los empleados en otra cinta basada en otro vale madres famoso del universo de los cómics: Constantine. Sin embargo en Max Payne estos demonios son los efectos de la droga Valkir, por lo que son simplemente alucinaciones de los personajes que uno como espectador puede apreciar y por lo tanto ayuda a comprender ciertos comportamientos de los personajes.
En conclusión, Max Payne es una película palomera digna representante de las películas de acción que el canal cinco se digna en presentar periódicamente. John Moore opto por la vía fácil y realizar una película plana sin pretender dar un trasfondo a los personajes. Esto le significa una película mas de acción aunque no le significa el blasfemar a un videojuego y por ende a toda su mitología. En la escala láctea recibe una evaluación cuantitativa relativa de 8. Constantine esta muy presente en mi mente y el ver a esos seres alados en un infierno en la tierra me gusto. Por lo que en traduciendo al castellano esta evaluación significaría: “Verla en cine vale la pena considerando que no hay muchas cosas buenas en cartelera en este momento. Aunque mejor es ahorrar comprando el DVD en el centro pirata favorito porque la temporada de invierno viene con la segunda tanda del año de películas de gran inversión.”





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