Halloween llego una vez mas y como es costumbre los churros fritangueros también para no variar. Sin embargo la Catrina en esta ocasión pocos gritos obtendrá de aquellas presas que películas de espanto al cine van a buscar pues a pesar de ser Paranormal no tiene nada nuevo que mostrar.

La trama ubica al público seis meses antes de los acontecimientos de la primer Actividad Paranormal. Aquí conocemos a Kristi (hermana de Katie), su esposo Dan y Ali (hija de Dan). Las primeras secuencias se centran en esta familia que festeja a su nuevo integrante, Hunter. Después de un aparente robo Dan hace colocar varias cámaras en la casa además de que Ali cuenta con una cámara de mano con la que graba durante la casa. Desde el primer momento una presencia maligna se hace presente y es percibida por el perro y la chacha, Martine. Sin embargo Dan despide a Martine después de que la encuentra rezando y quemando incienso por la casa. Los acontecimientos se vuelven mas evidentes: puertas que se abren de repente, cosas que se caen y mueven sin motivo. Hasta que Kristi es poseída y la única solución es pasar al espíritu a otro pariente cercano (Katie) con la única consecuencia de no recordar nada de lo ocurrido. Así sucede y la vida de Dan y Kristi parece regresar a la normalidad. Sin embargo justo después de que Katie asesina a Micah en la primera parte va a la casa de su hermana y mata a Dan y a Kristi para luego raptar a Hunter. Al final nos indican que Ali estaba de excursión y que regresando a casa descubrió los cuerpos; así también que el paradero de Katie y Hunter se desconoce.

Las actuaciones son malas. A pesar de que las tomas son descuadradas o fuera de foco a propósito para dar al filme más realismo al momento de prestar atención en las reacciones de los personajes es notorio captar ciertos detalles como expresiones faciales que indican el proceso del actor para recordar las frases. La banda sonora es nula pues emula un ambiente real de una casona donde los fragmentos grabados de los acontecimientos son solo de minutos. Los efectos especiales y digitales permanecen constantes. Son buenos, principalmente en donde el espíritu jala a las personas. De ahí en fuera las puertas que se abren, los objetos que se mueven o caen, en incluso cuando ataca a Dan y la cámara de mano pasa a modo de visión nocturna se ven… chafas.

En conclusión, Actividad Paranormal 2 no consigue superar a la primera parte, tanto en trama, desarrollo y efectos empleados. Sirve solo como apoyo a la trama o eventos vistos en la primera parte. Los sustos para quienes vieron la primera y hayan madurado desde entonces les parecerá una deuda terrible con el público. Para quien no ha visto la primer parte posiblemente le resulte en cierto grado impactante aunque al ser una precuela la trama es previsible. En la escala láctea del terror y de segundas partes esta película recibe una evaluación relativa de 6. En castellano esto se traduce como: “Desde el momento en que entro en juego Hollywood se veía venir que la(s) secuela(s) estarían por debajo de la calidad de la primera. Únicamente recomendable si no hay otras opciones de entretenimiento.”