Los ochentas fueron una buena década para la animación. En ella surgieron series que ahora son recordadas con nostalgia y otras son de culto. Los Thundercats, He-man y los Amos del Universo, Transformers, Robotech, etc. etc,. etc… Lo contrastante pareciera que esta época fuera carente de ideas, de innovación, y por tanto se reciclaran las viejas series en un intento por ofrecer cosas nuevas a los consumidores. Mientras siguen reconstruyendo el pasado, quienes tuvimos la fortuna de vivir la infancia en esa década podemos saborear y vomitar estas adaptaciones para la nueva era.

La trama de esta cinta nos cuenta como Cibertron desapareció. Y la fuente de vida de este planeta-civilización, el cubo, fue a caer a la tierra. También callo Megatron pero este debido a un fallo en su sistema de navegación cayo en el ártico y se congelo. Ahí fue encontrado por unos exploradores y mantenido en secreto por el gobierno norteamericano. En la epoca actual un joven Sam Witwicky adquiere como primer automóvil un Camaro, que en realidad es una Autobot de nombre Bumblebee y que funge como vigilante de Sam. Sam es pieza clave para los Autobots pues posee los lentes de su Abuelo, el descubridor del cuerpo de Megatron, pues estos tienen unas marcas con las coordenadas de la ubicación del cubo. La pelea entre Decepticons y Autobots por poseer la vieja chispa contenida en el cubo llega a la ciudad donde ambos lados tienen perdidas, Jazz por los Autobots y Frenzy, Blackout y …  Al final el bien prevalece sobre el mal y al no haber mas Cibertron los Autobots adoptan la tierra como hogar y juran protegerla.

Los efectos especiales no son realmente algo sorprendente. Pues la animación de la transformación es así como lo era en las caricaturas, muchos fierros girando de aquí a allá, metal que desaparece y se simplifica en un cuerpo aun más esbelto que el que poseían los robots originales. Aun asi sacan del espectador infantil un sonoro wow! y de los veteranos un "esta chido!" Las actuaciones de los personajes reales no son ni malas ni buenas, sino lo indicado para su función en una cinta de acción-fantasía.

En conclusión Transformers es una cinta que dejara dos sabores de boca. Para quienes no conocen a los Transformers se les hará la mejor cinta del año. Para quienes ya los conocemos y podemos comparar con todas sus encarnaciones (la animación japonesa, los Beast Wars y los recientes Energon) podemos decir que en el aspecto estético dejaron mucho que desear ya que su apariencia robot es mas parecida a la de un insecto mecánico que a la de un humanoide. Otro punto que puede decepcionar son los héroes típicos de acción que aparecen. Pues en el ataque realizado por Blackout al inicio de la cinta sobrevive un pequeño escuadrón. Hasta ahí podría resultar creíble pero cuando ese mismo remanente es atacado por Scorponok y sobrevive nuevamente resulta ya inverosímil la suerte humana. Luego le agregamos que una señorita y un simple hacker gringo son los únicos que tienen idea de lo que esta pasando (un posible ataque alienígena) lleva lo inverosímil a lo ridículo. Esperemos que todos estos detalles sirvan para hacer una mejor secuela. Mientras tanto esta película recibe una calificación relativa de 9. Transformando esa evaluación a un resultado cualitativo, quiere decir que "Es una película que hay que verla si es posible en IMAX y el DVD es compra obligada".

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